Arriba, en un cielo oscuro, una gran rueda de piedra no se detiene por nada ni por nadie. Gira sobre su eje, inmóvil e impasible devora las muescas de su relieve en busca de nuevas muescas, nuevos hombres que matar bajo su peso infinito. Pues es asi como el tiempo nos atrapa.
Abajo, un gran mar de sentimientos con grises olas alborotadas. Las crestas chocan unas con otras, se enfrentan, se destruyen y nacen olas nuevas. Cada una de ellas alberga la esperanza de permanecer para siempre en ese gran mar. Pero no puede ser, nunca es así, cada ola tiene su principio y su final y ninguna esperanza humana consigue navegar hasta el final de los dias.
Entre el mar y la gran rueda se alza inmisericorde un gran ojo verde. Intenso y poderoso se alza entre el sombrio mar de amores y la rueda eterna del tiempo. El no mira, tampoco observa. Tan solo se dedica a iluminar con su pureza los siniestros designios humanos. Es con su luz con la pierdo la calma, luego todo es borroso. Temo perder el sentido y caer vacío, descubrir que ya no tengo alma. Antes no era así, antes era nervioso en mi interior, tenia inquietudes, preguntas, ganas de vivir y hambre de conocimiento.
Tal vez la rueda me devore pronto, no seria una gran perdida, saboree con gusto la vida, tan solo me falta por probar el sinsabor de la muerte. El mar ya no me atrae, sus olas me parecen vanas y frágiles. La falsedad de algunos sentimientos queda aquí aprisionada y por fuerza destruida. Tan solo el reflejo de la luz intensa del ojo sobre las olas me hace permanecer aquí y no abandonarme, dejar de correr para escapar de la rueda y aceptar mi destino. El mar ejerce un embrujo sobre los rayos verdes, haciendo que su tonalidad varie, apagando su llama, palideciendo sus suspiros hasta que la oscuridad acepta el reto y penetra en mi universo. Poco a poco, lentamente como si quisiera disfrutar de cada momento antes de la noche voy cediendo mi corazón, hasta que justo antes de la oscuridad eterna un último rayo verde ilumina mi universo y veo lo bello que ha sido. Veo la cantidad de muescas en mi rueda y observo orgulloso todas y cada una de las olas que me han acompañado hasta este momento. Por desgracia es un momento efimero y la oscuridad se apodera de mi alma.
Paco y Jhony son dos amiguetes de un pueblo perdido del interior en su afanoso viaje para disfrutar de unas bien merecidas vacaciones despues de un año de duro trabajo en la planta de reciclaje de residuos organicos (rodeados de mierda, para entendernos). Su aventura comienza de la misma forma que todas las aventuras, es decir, por el principio. Ahora ya, sin mas preambulos...
Paco y Jhony de Vacaciones en la Playa
JHONY – Aquí estamos, recién llegados a la playa, sol, cuerpos bronceados, calor y vacaciones. PACO - Si, yo también tengo ganas de suicidarme. JHONY – Ya te digo, lo mejor será alcoholizarse a ver si nos olvidamos. PACO - No se si podremos con el marcaje al que te tiene sometido tu novia. JHONY – Para marcaje el de la cara. PACO -¿Cuál? JHONY – El de la ostia que me dio el otro día por volver borracho. PACO - Normal, ¿Cómo se te ocurre? JHONY –¿Lo de ir borracho? PACO - No, lo de volver. JHONY – No lo se, a alguna parte tenia que ir, los bares cerraban pronto y los supermercados abren tarde. PACO - Hablando de tarde, ¿Qué te parece si nos pegamos un bañito en el mar? JHONY –¿Qué tiene que ver una cosa con la otra? PACO - No lo se pero sigo queriendo suicidarme JHONY – Ahora lo entiendo todo…
Paco y Jhony se acercan andando a la playa y tras tres minutos de baño deciden salirse a la arena…
JHONY - Pues yo pienso que no se esta tan mal en la playa. PACO - Claro, a ti no te han picado 7 medusas en la misma pierna. JHONY - No pero mi mujer a intentado besarme en varias ocasiones. PACO - Podrás comparar, solo lo intento 3 veces. JHONY - Pero es mas venenosa. PACO - Si, eso si. JHONY - Por cierto podríamos ir al chiringuito de las palmeras. PACO - Vale, hace tiempo que quiero hacerme un lavado de estomago. JHONY - Si, lo dejan bastante limpio, creo que utilizan un detergente especial. PACO - Especial es la camarera, nunca vi a nadie tan interesado en no interesar a ningún interesado. JHONY -¿Que quieres decir? PACO - Da igual lo que yo quiera decir, ella nunca viene. JHONY - Si, eso mosquea bastante PACO - Más que enfadarme me da que pensar que algo pasa en este mundo para que un alma solitaria no encuentre su camino en la noche. JHONY - Pasa que eres feo de cojones. PACO - Yo también adoro a tu mujer. JHONY - Dejémonos de tonterías y vayamos a por una cerveza de una vez
Se acercan al chiringuito…
PACO – Ya veras, como no me hace ni puto caso. JHONY -Prueba a ver. PACO –¡Camarera! ¡CAMARERAA! Nada, ni puto caso. JHONY -Espera que pruebo yo… ¡SHOSHO! CAMARERA - ¿Si mi amo y señor? JHONY -Dos birras heladas y un lametón a tu pezón. CAMARERA -¡lSlurp!, enseguida mi amo. PACO – Joder, no se como lo haces. JHONY – Yo tampoco, deberías verme en hacienda.. PACO –¿También te hacen caso a la primera? JHONY – No pero me libro de las retenciones PACO – Eso sera en trafico JHONY – Si, también me retienen alli PACO – Retener es malo, te puede estallar la vejiga CAMARERA – Aquí están las cervezas, ¿desea algo más mi amo? JHONY – Tráenos unos panchitos o algo CAMARERA – No tenemos mejicanos JHONY – Pues un poco de morro de cerdo CAMARERA –Lo siento, ingleses tampoco nos quedan JHONY – Mierda, da igual, trae la cuenta y otro lametón a tu pezón CAMARERA –¡Slurp! enseguida
Nuevos designios que esconden a gente sin sentido. Payasos del saber que se ríen sin conocer su ignorancia.
Érase una vez un Pablito sin careta, un chaval normal con bastante cabeza. Con una ilusión difícil de encontrar, ansias de trabajar y constancia en su lucha. Con un futuro brillante lejos de todo ejemplo recibido. Un chico diferente con un aire de abstraído pero con un brillo en los ojos que dejaba claro que no se le podía tomar por tonto ni mucho menos.
Afrontaba su futuro con cierta premura y le faltaban pasos en su escalera, mas no se preocupaba pues sabia que llegarían y que pronto dejaría de ser una promesa para convertirse en una realidad.
Pero como en toda historia las cosas no podían ir bien eternamente, y en un momento de relajación se embarco en una aventura que a la postre le abriría un mundo nuevo, tan alejado de sus designios que no fue capaz de soportarlo.
Así es la vida de Pablito, un cruel destino le privo de su futuro cuando, solo y sin un duro, mando todo a tomar por culo. Le perdieron sus ansias de ser mayor sin serlo, su inmadurez ya madurada, las ganas de moverse con una libertad que aun no le podía ser dada. Decidió dejarlo todo, su esperanza de ser alguien, por un trabajo sucio y un consumo miserable. Grande, muy grande chaval…
No contento con su vida, carente de femenina compañía, consintió que la genética le perdiera y que un ama con su látigo le acogiera. El nunca antes había conocido el placer y le sorprendió. No quiso ver más allá y, sin un ejemplo mejor, pensó que su vida debía ser así. Atado con mordaza y sin opción de decidir. De ella aprendiste el odio, el sinsabor y, de tu tiempo, el monopolio. Te enseño a reverenciar el dinero sobre todas las cosas, a entender su valor sin prosa, a despreciar la amistad más peligrosa y a asentir como un pollino con la cabeza gacha.
Tú que fuiste soñador, tú que fuiste la alegría, te quedaste con amor pero también con la apatía. Ella le controlaba su carencia de futuro e impuso su cruel lógica siniestra, “¡Tus amigos no merecen tu cariño ni nadie que les quiera! “. Pobre Pablito, el tan amigo de sus amigos, paso de sus colegas por la esperanza de un futuro junto a ella. Gran fallo my friend. Perdiste tus amigos, tu libertad y tu futuro, y sin ellos tu orgullo.
Grandes son los fallos cometidos, crueles son las consecuencias. Más por fin se ha redimido a través de la nueva inocencia. Ahora por fin mira feliz su vida sin arrepentirse orgulloso de haber hecho algo que merece la pena. Pobre Pablito que se engaña el solo, pues no puedes vivir tu vida a través de los otros.
Pero el sabe, nunca dije que fuera tonto, el entiende que en realidad se encuentra solo. Dentro de sus ojos ya no hay esa luz que antes poseían. Ya no es el chico brillante al que a todos orgullecía. Su futuro a pasado a ser de un gris mate y su unica luz no proviene de el, pero no le importa,
Ante los hechos acontecidos el pasado sábado no me cabe nada más que felicitarle. Jamás había conocido a nadie que aguantase mejor semejante acontecimiento y demostrase de forma tan caballerosa su objetividad con la acción a desarrollar. Aun diría más, es usted un ejemplo a seguir para todas las generaciones futuras que se encuentran ante tamaña visicitud y, desesperados, no acudan en tropel a una solución, a su juicio, mucho más directa y sencilla.
Hay que tener valor para justificar una acción de otro modo descabellada y que se podría adjetivar como de poca cordura. Libros enteros se podrían escribir sobre este hecho y de cómo la sociedad permanece impertérrita ante actos de esta envergadura. Ante lo cual no me queda otra que desestimar todo lo aprendido y vaciar mi sabiduría para volver a llenarla de su conocimiento y de su forma de ver la vida. La misma vida que no le reconoce la magnitud de su acto debería ser más fiel a sus principios y llenar de colmada felicidad su mísera existencia.
De nuevo no me queda mas que agradecerle que cuando el sábado pasado se me cayo 1 euro me lo devolviera en el acto.
Se pierden al pasar de los idilios a los desamores, al cambiar los corazones por razones, al idiotizar la mente y el alma sujetando con calma sus instintos de delirio.
No podrías conmigo, ni aun en cien años. Desesperarías con locura por un juicio baldío, sin sentido. Retuércete en el suelo cual gusano, maldito. Déjame delirar que por ello respiro, no censures el torrente de palabras que de mi mente emana aun en tiempos sombríos.
Y calla, que tus pensamientos insulsos no estropeen la belleza del silencio. Que ese cuello de botella, que tu llamas mente, carece de ingenio. Delirar es un lema que merece mas respeto.
Delira y aprende, delira y espeta a tu gente a que lo haga. Delira por ser libre, se libre para delirar. Monologa tu mismo y descubre que te hace delirar, que cuanto mas delires mas libertad tendrás. A través de tu delirio alcanzaras la luz y saldrás de tu cueva, que falta te hace.
La locura es el estado que la sociedad alcanza al recorrer el largo camino que marcan las leyes visuales, anárquicas e influyentes de la profunda verborrea deus gratia que comprende el estado animoso de nosotros los humanos. El paso del tiempo aclara en el cerebro la complejidad alcanzada en los altos grados de segmentación post-fetal producidos de manera espontánea en la zona peritoneal. La afiliciación a partidos políticos sólo supone un escalón más en la escalera de caracol que todos recorremos una vez en pos de la demencia, afectando ello a la paciencia y demás virtudes análogas. También es anal la penetración que dicha afiliación produce en nuestros corazones ya que el dolor que recorre todo el cuerpo al ver la estupidez de los políticos estremece hasta a los gatos pardos de la realeza. Chalets adosados y pisitos en la playa, tristeza perversa de los incentivos que las empresas nunca regalan. Quieren tu vida, tu alma y tu cuerpo (eso sólo el jefe que es sarasa y su mujer le pone los tochos con el portero de una conocida discoteca madrileña situada en la avenida Paisos Catalans).
Incongruencias en el alma, desavenencias con tu ser, respeto por la calma, moralejas del saber.
Todo ello es locura, y más locura llevo escrita ya.
Si comprendes el significado de todo lo anterior es que compartes la locura con todos nosotros.
"dime que es locura... locura eres tú..."
"dime mundo en quién has de confiar y déjame que yo elija de quién me fio. Que tus esperanzas son vanas y grandes mis desafíos"
Delirios azules, delirios amarillos... delirios in the sky nace para dar rienda suelta a los delirios mas intimos de su creador. Sin mas intencion que reflejar fielmente su libertad al escribir
